Hoy me compré una nariz de payaso (: y anduve por la calle con nariz de payaso (:
Estoy cansada. Un poco aburrida, también. Ya no me dan ganas de ir al colegio, es tan fome! no hacemos nada, nunca. Una que otra prueba, una que otra mala nota... al final, vamos a puro contagiarnos los resfriados y la porcina.
Y lo peor, es que después de esas semanas de vagancia absoluta, nos enfrentamos a semanas atroces llenas de pruebas todos los días y trabajos de esto y de lo otro.
Les voy a contar una historia... no se si tiene moraleja, pero al menos me dejó pensando.
Había una vez una niña, un niño y un carrete. Ellos son del tipo de personas que cada vez que se ven, no pueden evitar comerse con los ojos y empelotarse mentalmente. Y si, se tiran palos constantemente.
Un día, en este carrete, ellos se quedaron solos y empezaron a agarrar. Y obviamente se dió LA situación DE. Pero ella, dentro de la pasión que inundaba su cerebro y cada celula de su cuerpo, pensó en ese minimo detalle que la perturbaba: la dignidad.
Si, mortales, esa mínima cuota de dignidad femenina que todavía tenemos algunas. Ese chip en nuestra mente que nso impide atentar contra los, o el, valor de nuestro cuerpo de mujer.
En el fondo, la idea de "no me voi a tirar a un mino que no me quiere para nada más que esto, porque tengo un mínimo de respeto hacia mi misma y no dejaré que nadie pase por ensima mio".
Punto. Y se lo dijo. Y él le dijo a ella que era una rara bipolar.
tenemos dos opciones, entonces:
a) pensar que ella si es una rara bipolar, que le dice que lo haría tiras y luego en el momento DE finalmente dice que no. Lo que vendría siendo muy feo, o sea... calentar la sopa y al final no tomarsela.
b) comprender el esfuerzo mental que significa poner la dignidad y respeto propio por sobre las hormonas.
¿Qué pensar? yo voto por la opción b).
pinté un cuadro (: y descubrí que no hay nada más emocionante que firmar un cuadro con tu nombre y apellido y que todos digan "oh, qué lindo cuadro!". a ver si uno de estos días subo una foto.
Tengo un dilema. Quiero estudiar publicidad como primera opción. Pero hace poco descubrí que odio al consumidor, que me importa muy poco o nada lo que el consumidor piense y que lo único que quiero hacer es usar mi imaginación y talentos (eeeeh) artísticos (: o sea, depender de lo que digan los informes que me entreguen los tipos de marketing. Yo quiero hacer lo que el consumidor quiera, no me interesa porqué lo quiere. en fin.... sino, será diseño.
chau :D